Mereces una vida fácil y fluida
Recientemente estuve dando un curso a mis queridos amigos de Century 21 y el tema de que algo sea fácil trajo diversas opiniones. Esto debido a que hay gente que cree que lo fácil no tiene valor. Aquí te doy mis impresiones al respecto. Espero sirvan para crear una mejor vida para ti.
El esfuerzo no se opone a lo fácil.
El centro de nuestra diferencia con respecto a lo fácil estaba centrado en que para algunos de los participantes, esto significaba que no había esfuerzo. Uno de mis queridos alumnos decía que en las organizaciones se premia el esfuerzo y eso debía ser así. Por otra parte sostenía que aquellas operaciones difíciles y complicadas dejaban mayor aprendizaje.
Les compartía que para mi un trabajo fácil, era aquel donde las relaciones eran armónicas, el proceso era fluido y en general como consecuencia de esto, el resultado era exitoso. Creo en el esfuerzo, creo en la excelencia, pero no creo en la lucha. En mi opinión la lucha ocurre cuando estás nadando a contracorriente. Si te fijas en la naturaleza, todo fluye y es armónico. Por ejemplo, una flor para germinar, no pelea con la tierra para atravesarla. O un ave para volar, aprovecha la dirección del viento o si no lo hay, extiende sus alas y sus movimientos son con soltura. Creo que en la naturaleza hay un claro mensaje para nosotros, que también somos parte de ella.
Regresando a la clase, estaba de acuerdo con este participante referente al hecho de que el esfuerzo es valioso. El éxito es producto de muchos elementos, entre ellos la excelencia y siempre hay que apuntar a ella. Por otra parte, claro que experiencias complicadas dejan una experiencia y esa es una forma de ganancia. Sin embargo lo que les agregaba es que consciente o inconscientemente, algunas personas buscan o invocan situaciones complicadas, que significan lucha o conflicto. Sólo en medio de esas experiencias que incluso a veces son límites, sienten que están logrando algo. Y en esos casos es donde creo que debe ocurrir un cambio.
Lo que fácil viene fácil se va.
Hay muchos pensamientos colectivos que desmerecen lo fácil, que lo catalogan como algo que no es bueno. Por ejemplo, hay un conocido y viejo dicho que nos hace suponer que si algo te llega de manera fácil, lo vas a perder pronto. Nuevamente hace referencia a que no debemos buscar lo fácil.
Por mi parte, durante muchos años tuve un patrón de lucha el cual se mostraba en mis trabajos. Vale decir que un patrón es una conducta que ocurre de forma repetitiva. Inconscientemente buscaba los trabajos más complicados. Cuando no era la labor en sí, había dificultad en las relaciones, con el jefe o con el equipo de trabajo. Cuando tomé consciencia de ese patrón, elegí cambiar mis pensamientos en cuanto al trabajo y al éxito.
Como resultado, ahora tengo no sólo una labor que me apasiona, sino que todas las personas con las que trabajo son un regalo para mí, nada de conflicto. Recibo un pago del cual me siento satisfecha y disfruto tanto de lo que hago, que si no fuese necesario el dinero, no cobraría. Por eso sé que lo fácil es bueno y puede perdurar.
Si la palabra fácil te inquieta qué tal fluido.
Quiero darte un ejemplo. Hay una diferencia entre nadar usando la corriente del agua a favor y cuando nadamos a contracorriente. En el primer caso, el avance es mucho, se aprovecha el entorno y el cansancio disminuye. Por el contrario, nadar contracorriente representa una enorme lucha y poco avance, porque el entorno es adverso.
A veces no es tan evidente para ti si estás en una u otra situación. A veces estas tan acostumbrado a la lucha y al conflicto que simplemente crees que la vida es así y ya. Sin embargo, te reitero, tú puedes tener una vida en la cual disfrutes del trabajo, tengas relaciones armónicas y tu remuneración sea justa. Mereces esforzarte, buscar la excelencia y tener éxito sin que -como dice un viejo dicho- dejes el pellejo en el camino.
Ahora, para lograr esto que te propongo, son necesarias dos cosas. Por una parte es preciso que cambies ciertos pensamientos y por otra que estés muy alerta para ver las señales. La vida es sabia y en general nos habla de maneras sutiles. Pero debemos estar despiertos y atentos para ver cual es el lugar que verdaderamente nos corresponde, ese en el cual todo es más fluido. Hay lugares que no son los apropiados para ti. También hay personas con las cuales tienes tantas diferencias de estilo que es preferible evitar trabajar con ellas. A veces las dos cosas anteriores son las correctas, pero el tiempo no es el adecuado. Finalmente, hay lugares o culturas corporativas que simplemente no se parecen a ti y es preferible dejar ir. Claro para esto tienes que tener la suficiente confianza en Dios o en la vida, para saber que si esa puerta se cierra, otra se abrirá.
Algunos pensamientos que te ayudan a construir una vida fluida
1.- El trabajo es mi fuente de desarrollo y disfrute.
2.- Mis relaciones son armónicas y amorosas.
3.- Amo lo que hago y hago lo que amo.
4.- Yo soy un imán para el dinero.
5.- Dios me provee de todo lo que necesito.
6.- Yo merezco una vida fácil.
Mereces una vida fácil y fluida.